El Ministerio de Transportes ha reactivado por la licitación para actualizar el proyecto constructivo del tramo entre Puente la Reina de Jaca y el límite con la provincia de Zaragoza

El Ministerio de Transportes ha reactivado la licitación para actualizar el proyecto constructivo del tramo de la A-21 entre Puente la Reina de Jaca y el límite con la provincia de Zaragoza, paralizado desde marzo por “errores” en los pliegos. El nuevo plazo para la presentación de ofertas, abierto desde el pasado 2 de junio, se extenderá hasta el día 16, dando así una nueva oportunidad a las empresas interesadas en ejecutar la obra.

El contrato, valorado en más de 3 millones de euros, contempla la “actualización del proyecto de trazado y construcción” de este último tramo pendiente entre Aragón y Navarra. Se trata de una infraestructura largamente esperada tanto en Aragón como en la comunidad vecina, y necesario para completar la autovía A-21 entre Jaca y Pamplona. Este avance llega tras la reciente inauguración del tramo Sigüés-Tiermas, también lastrado por años de retrasos.

Una vez adjudicado el contrato, la Demarcación de Carreteras mantiene su previsión inicial: el rediseño del trazado debería completarse en un plazo máximo de 36 meses. Si los plazos se cumplen sin contratiempos, el proyecto no estaría finalizado antes del segundo semestre de 2028. Esto implica que la licitación de las obras podría demorarse más de un año adicional, y que los trabajos de construcción no comenzarían antes de finales de 2029 o principios de 2030.

El calendario sigue siendo lejano, pero al menos empieza a perfilarse como realista, tras años de bloqueos que han frenado el desarrollo de este eje viario estratégico para el Pirineo. Una vez terminado, permitirá reducir los tiempos de trayecto, mejorar la conexión con las estaciones de esquí de Astún y Candanchú, y reforzar la seguridad vial en una zona de difícil acceso.

El plan contempla dividir el tramo en dos subtramos: uno entre Puente la Reina de Jaca y Berdún, presupuestado en 55 millones de euros, y otro entre Berdún y el límite con la provincia de Zaragoza (cruce de Fago), que alcanzaría los 68 millones. En total, más de 123 millones de euros que permitirán cerrar la A-21 en su recorrido aragonés. Todo ello, siempre que no se sume otro gran escollo pendiente: la terminación de la variante de Jaca, otro proyecto que sigue sin avances visibles.