Villamayor de Monjardín

Introducción

Villamayor de Monjardín es un pequeño municipio de Navarra situado en la comarca de la Ribera Alta, caracterizado por su ubicación estratégica en el Camino de Santiago y por la presencia del castillo de San Esteban de Deyo, también conocido como Castillo de Monjardín, símbolo de su pasado histórico y militar. La localidad combina patrimonio medieval, paisajes agrícolas y vitivinícolas, y un entorno natural privilegiado entre las sierras de Lókiz y Codés.

Historia

La historia de Villamayor de Monjardín está estrechamente ligada al Castillo de San Esteban de Deyo, también conocido como Castillo de Monjardín, una fortaleza construida en el siglo X sobre un altozano de 890 metros. Según la crónica medieval, el rey navarro Sancho Garcés I tomó la fortaleza en el año 908 tras un intenso combate, arrebatándola a los ocupantes musulmanes, lo que permitió a Navarra controlar estratégicamente el valle del Ebro y consolidar su expansión frente a los Banu-Qasi. Esta conquista fue clave, ya que la fortaleza servía como puerta de entrada para los ejércitos navarros en la región y había sido previamente sitiada tanto por las fuerzas de Carlomagno como por el Emir Abd al-Rahman I de Córdoba.

Tras su conquista, el castillo fue donado por Sancho II al monasterio de Irache y posteriormente pasó a la Catedral de Pamplona por decisión de Sancho el Mayor. Más tarde, tras la invasión de Navarra en 1512, la fortaleza pasó a poder del Duque de Alba, consolidando así su relevancia estratégica y militar durante siglos. Durante las guerras carlistas, el municipio sufrió ocupaciones alternas por parte de los ejércitos centralistas y carlistas, reflejando la persistente importancia militar del lugar.

El crecimiento del pueblo se desarrolló alrededor del castillo y la iglesia parroquial, convirtiéndose en un pequeño núcleo rural de gran valor defensivo y religioso. Villamayor de Monjardín fue además un enclave de paso importante en la ruta jacobea, sirviendo de referencia para los peregrinos en su camino hacia Santiago de Compostela, lo que le confería cierta relevancia económica y cultural en la Edad Media.

Patrimonio

El Castillo de San Esteban de Deyo domina el perfil del pueblo con sus restos de muros de piedra arenisca, un antiguo algibe y los vestigios de la torre de homenaje. Dentro del recinto llano, que servía como espacio defensivo, se ubica una ermita de construcción tardía, y se aprecian los restos de murallas que formaban un perímetro fortificado de unos 62 metros de largo y 30 metros de ancho. La fortaleza ofrece un testimonio directo del poder militar y la arquitectura defensiva medieval navarra.

La Iglesia de San Andrés Apóstol, edificada en estilo románico con influencias protogóticas, es otro elemento patrimonial destacado. Consta de una sola nave y una amplia cabecera, sostenida por columnas con capiteles vegetales, arcos fajones y contrafuertes exteriores. Su pórtico románico presenta arquivoltas, un crismón, jambas y capiteles que representan escenas de batallas medievales, como la lucha entre Carlomagno y un príncipe navarro, y conserva herrajes medievales originales.

En el interior se conservan valiosas piezas de orfebrería del siglo XVII, como relicarios, cálices y crismeras barrocas, así como casullas bordadas del siglo XVIII y XIX. Destaca una talla del patrón San Andrés, originaria del retablo, que junto con el pórtico y la sacristía refleja la riqueza artística y espiritual de la villa. Además, las murallas del castillo y el trazado urbano medieval conforman un conjunto histórico que permite apreciar la fusión entre fortaleza, iglesia y pueblo.

Camino de Santiago

Villamayor de Monjardín se encuentra en un tramo histórico del Camino de Santiago, donde la subida entre viñedos y campos de cultivo conduce hacia la cima de Monjardín, ofreciendo vistas panorámicas del valle de Allín y de las sierras de Lókiz y Codés. La localidad ha servido históricamente como punto de referencia y descanso para peregrinos, combinando su vocación defensiva y religiosa con la asistencia a los caminantes. La iglesia parroquial y el castillo son hitos que permiten a los peregrinos conectar con la historia medieval y el patrimonio jacobeo de Navarra, mientras que los paisajes agrícolas y la tranquilidad del entorno ofrecen una experiencia pausada y cercana a la naturaleza.

Festividades

Las festividades de Villamayor de Monjardín están ligadas principalmente a la celebración en honor a San Andrés Apóstol, patrón de la localidad, que combina actos religiosos, procesiones y eventos culturales. La villa también organiza actividades culturales y recreativas relacionadas con la historia del castillo de Monjardín y la tradición jacobea, como rutas guiadas y jornadas de interpretación histórica.

Otras actividades incluyen ferias locales, eventos gastronómicos y visitas guiadas al patrimonio histórico y natural, destacando la combinación de turismo rural con la riqueza arqueológica y arquitectónica. La proximidad a los viñedos y olivares permite además actividades enoturísticas y senderismo, integrando la historia con el entorno natural.

Actualidad

Hoy, Villamayor de Monjardín es un municipio tranquilo con fuerte carácter rural, centrado en la agricultura y la viticultura. Su ubicación privilegiada en el Camino de Santiago y su riqueza histórica lo convierten en un atractivo destino turístico. Las visitas al castillo y a la iglesia, junto con la experiencia del entorno natural, permiten combinar historia, cultura y naturaleza, manteniendo viva la identidad histórica del municipio.